Es bien conocido que cada uno tenemos un tipo de red en nuestras casas y normalmente distan mucho de ser la óptima ya que, por ejemplo, en casas «viejas» no es nada sencillo convencer a la «parienta» para tirar fibra por toda la casa para tener una red cableada que siempre es la mejor.
Otros en sus minipisos de la ciudad hasta pueden conformarse con una red WiFi pero otros (normalmente los que habitamos en adosados o similares) tenemos que acudir a la ayuda de los PLCs para poder mandar la señal al punto más alejado y luego distribuirla desde allí al resto de la casa.
Aunque parezca mentira hasta ahora no era fácil encontrar soluciones mixtas que hiciesen un aprovechamiento inteligente de las ventajas del PLC y de la WiFi…
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